diumenge, de juliol 11


La máquina de les notícies


He trobat aquest article d'en Victor Amela a La Vanguardia d'avui...

En el Telenotícies veo imágenes de un joven zarandeado por un toro, dos toros, ¡tres toros! en una calle de Pamplona. Estremecedoras, de miedo. Sobre las imágenes, la voz del presentador me dice: “Un joven de Sabadell fue cogido por un toro en el encierro de los Sanfermines de hoy. Sabremos cómo se encuentra... dentro de unos momentos”. Y aquí entra un (largo) bloque de anuncios.

Los Telenotícies han aprendido a usar las técnicas del suspense cinematográfico, de los culebrones y teleseries de ficción, de los viejos folletines novecentistas por entregas, en suma. Los informativos hacen ahora lo que hacía el pionero Julián Lago en La máquina de la verdad hace ua docena de años, ¿te acuerdas?: “No me lo diga ahora. Dígamelo... ¡después de la publicidad!”.

Todos los informativos televisivos aplican esta fórmula desde hace algún tiempo, y de modo cada vez más refinado. Se abren los telediarios con imágenes espectaculares, se anuncia su repetición para atrapar al telespectador, se dosifican estratégicamente informaciones e imágenes para mantener la tensión narrativa desde el sumario hasta el cierre del telenoticiario. Es muy lógico: al fin, los informativos televisivos nacieron en la televisión norteamericana por un imperativo legal, y las cadenas decidieron aplicar a esa narración informativa todos los trucos y recursos del cine de Hollywood.

En la televisión, la información es siempre una rama del espectáculo, como es natural. Los telediarios se parecerán cada vez más a obras de teatro, telecomedias, melodramas. Cada vez se parecerá más un Telenotícies a un show de Buenafuente, por lógica.

Por otro lado, recuerdo ahora la convulsión que hace años provocó la inclusión de cortes publicitarios en los Telenotícies: sonó a blasfemia, como a imprimir publicidad en la camiseta del Barça. Qué antiguos éramos. Lo lógico sería que los presentadores de telediarios portasen publicidad en la camisa y bebiesen de alguna botella cuya etiqueta fuese bien visible. Ah, y me pregunto a qué esperan para cerrar el informativo dándose un beso en la boca.